ROUND DE KEIKO. Por Juan Carlos Tafur.

Ya publicamos los resultados de la última encuesta de Ipsos Apoyo en la que la distancia entre ambos candidatos se ha acortado en casi un empate técnico, y tengo este análisis realizado por Juan Carlos Tafur en La Columna del Director en el Diario 16, muy esclarecedora por cierto de título Round de Keiko:

La última encuesta de Apoyo deja en claro que el movimiento estratégico del fujimorismo ha tenido éxito en cuanto a lo que anticipábamos iba a ser su objetivo primordial: recuperar para sí el voto que Humala tenía adherido en los sectores populares.

Comparando las dos encuestas realizadas por Apoyo después de la primera vuelta, los saltos más significativos son varios. Uno es el crecimiento en el A por parte de Keiko, que pasa de 42 a 56%. No es lo más significativo, porque allí –aunque en menor medida- también crece Humala, y porque no es tampoco el sector mayoritario.

Lo más decisorio, a nuestro juicio, ha sido lo ocurrido en el sector D, donde Fujimori no solo sube de 34 a 38% sino que Humala cae ¡de 47 a 40%! La variación, por lo que se ve en los resultados, radica por el momento en Lima, justamente donde la candidata de Fuerza 2011 ha concentrado sus esfuerzos de los últimos días. Es tanto el crecimiento, que sobrepasa en el promedio final al que Humala muestra en el sector rural nacional, donde crece de 47 a 51%.

Keiko Fujimori no ha requerido de personajes para recapturar ese votante que ya alguna vez ha sido fujimorista. Le ha bastado incorporar en su discurso referencias concretas a propuestas dirigidas a dicho sector. Los esfuerzos convocantes de Humala le sirvieron para no caer en el AB, pero no le han servido para retener a sus votantes.

Según la encuesta, ambos tendrían votos muy duros. No lo creemos. El electorado de Humala creció como la espuma en la segunda vuelta, más por demérito de Alejandro Toledo que por méritos propios. Hoy ve cómo esos votos son variables y volátiles.

La batalla, reiteramos, no está en el terreno de los indecisos. Es más, entre blancos, viciados y quienes no precisan su voto, el porcentaje sigue siendo casi el mismo entre ambas mediciones. El domingo último sumaban 22% los ciudadanos que no decidían por uno u otro. En la encuesta de ayer esa cifra es de 23%, casi idéntica.

Obviamente, algo de este segmento podrán cosechar los dos candidatos, más aún cuando resta un mes para la jornada definitoria. Pero la artillería principal, gruesa, estará centrada en el bolsón mayoritario y menos refractario al cambio. El “acercamiento” de propuestas aplicado por Keiko no creemos, en ese sentido, que haya sido casual. Ha elegido bien el objetivo y los resultados lo corroboran.